jueves, 30 de abril de 2009

DOS DÍAS




Y si sólo dos días te dieran ¿tú que harías?

miércoles, 29 de abril de 2009

EL CIEGO Y LA TURCA

En un bar se conocieron cuando a la hora del té, ella prefirió tequila.

Él andaba olvidado por algún barrio de la ciudad. Con ganas de dejar la conciencia de lado, por un tiempo por lo menos. La dejó (la conciencia) a las puertas del RaVar, reposando con los posos de la copa que ya sostenía. La barra rebosaba de apatía embotellada. Todo cambió, cuando a ella la escuchó. Se reía sin parar, hablaba torpemente pero el ciego la disculpó rumiando - es por el acento turco que nadie la entiende.

Se juntaron enseguida con la intención de la mayoría de locales, despistar al tiempo intercambiando litros por monedas. Coincidieron cuando al camarero le pidieron dos de vitamina Colocón, la vitamina C y calmante de heridas. Se sintieron revivir, fueron juntos hacia la deriva. Se miraron sin verse, las miradas no podían aguantarse. Sobre todo, el ciego. Diego, se llamaba.

Le habló éste de su oficio, su vocación siempre fue la conducción.
Pero ¿cómo? – preguntó la turca con desconcierto.
Autobusero de bares, en todos tengo yo parada – dijo el ciego.
Ahora entiendo, tú profesión es mi afición – sentenció ella.
¿Y tú a qué has venido a este país? – balbuceó Diego.
Huyo del rechazo, me casé en secreto con Jack Daniel’s pero todos dicen que no es bueno para mí, que nunca me ha hecho bien. Qué sabrán ellos – espetó ella con furia.

Y sin darse ninguno cuenta, entre ponche y ponche empezó la noche. Respiraban cada sorbo y también lo valoraban puesto que cada uno, lo pagaban. Un oxígeno que no era gratis. En la seguridad social, no entraba y muy lejos de la sanidad estaba. Se entendían sin saberlo porque afinidades compartían. Fue un encuentro afortunado el del ciego y la turca que acabó de madrugada. La euforia de ella quedó hecha trizas cuando su amigo se marchaba. El ciego la cambió por otra, con resaca se fugaba. Con las mejillas sonrojadas ella vio como aparecía el que nunca le fallaba, siempre que suelto le quedaba. El camarero le anunció – aquí está su Jack Daniel’s. La turca sonrió, sintiéndose la más afortunada. Incomprendida de por vida, es la historia del ciego y la turca.

lunes, 27 de abril de 2009

PARA A.

Qué fácil enterrar los muertos,
qué difícil los lamentos.

Lágrimas de cocodrilo
Frágiles como un hilo.

Duelen las mentiras
Cuando al fin las respiras.

La razón ahora me ignora
El corazón por eso, llora.

No entenderé tu rencor
Ni tantos obsequios de dolor.

Te he dado una pista
Poniéndote el primero de mi lista.

Con tu baile de ficciones
Rotas están las emociones

No entraré en el juego
de ver a quién le pesa más el ego.

Nunca me he pasado de la raya
Tú no has dado la talla.

Deseo lo mejor para ti.
Y no lo digo porque sí.

Buena suerte
Y hasta luego.

Hoy soy incapaz de sentir
Por eso tampoco me sale escribir.

domingo, 26 de abril de 2009

MAN ON WIRE


Un documental sobre los sueños. Habla de cómo Philippe Petit, funumbulista francés (equilibrista) se atrevió a cruzar, desde la azotea, los dos edificios que formaban las Torres Gemelas. Lo hizo con tal sólo una cuerda que se extendía de lado a lado de las torres.

Vivió siempre al límite, sin desistir de sus sueños. Se empeñaba una y otra vez hasta que los conseguía. Nadie pudo frenarle. Sus realidades intangibles, al resto les parecían imposibles hasta que él decidió darles una oportunidad. Creyó en sus sueños y esa fue su mayor apuesta. Se regaló, no buscó los porqués simplemente vivió constantemente en la cuerda floja y arriesgó lo que más apreciaba: su vida. Sin embargo, no le importó y no por sobredosis de coraje sino porque era su pasión; esa mezcla de excitación, peligro y riesgo que le provocaban estar encima de una cuerda.

Me atrevo (aunque mi atrevimiento es más verbal que real) a pensar incluso que Petit temió mucho más fracasar en sus sueños que a caer desde la planta 110 del edificio del World Trade Center. Su vida fue todo un reto y queda recogida en este documental.

De apellido Petit, este francés tuvo una gran pasión pero ante todo, fue un gran soñador. Se balanceó siempre sobre la cuerda pero nunca vaciló respecto a sus ilusiones.

viernes, 24 de abril de 2009

QUIZÁS NO TE CONOZCO

Sé que eso es lo que piensas y de veras me alegro si con ello, te quedas más contento. Aunque dime ¿acaso importa cuando…

…dices que trabajas y suenan goles de fondo.

Cuando dices que no has fumado y me giro para no ver el cenicero que parece una chimenea.

Cuando estás preocupado y lo traduces diciendo que estás cansado.

Cuando te cruzas de brazos haciéndote el ofendido porque no sabes pedir que esté pendiente.

Cuando vienes cargado de tristeza y te disfrazas de carcajadas.

Cuando tienes miedo y tu voz suena aún más grave.

Cuando los celos se quedan adentro y sólo sacas el sarcasmo.

Cuando cambias de tema porque has olvidado a qué hora hemos quedado.

Cuando te emocionas pero te contienes.

Cuando otros halagan tu arte y haces como si no le dieras ninguna importancia.

Cuando miras por el rabillo del ojo a las suecas que pasean. Yo mientras, me hago la sueca.

Cuando tu mirada entrenada de indeferencia actúa cuando ves que otro me da un abrazo.

Cuando te sientes un gallina y te vistes de gallito.

Cuando llegas tarde pero no admites que eres un presumido, demasiado para un tipo tan duro! El tráfico - me dices - y yo contesto que sí mientras pienso que las prisas le dan un aire a tu camisa que combina bien con tu sonrisa.

Cuando me observas un buen rato pensando que no veo a través de esas gafas de sol que llevas, creyendo que son tan opacas como la cáscara de un mejillón.

Cuando empiezas un "te quiero" y lo derrites con un "¿te apetece un helado?"

Cuando te pones algo cursi y tu orgullo te castiga.

Cuando logras ser el hombre de hielo y tu mirada irradia el calor del triunfo por haber logrado lo que nunca serás pero, que tan bien has interpretado.

Cuando te hago cosquillas pero no te ríes, no vaya a pensar que eres todo débil.

Cuando dices – yo no espero nada - con la mirada de los niños en la mañana de reyes.

Cuando te abrazo por la espalda y finges que no te gusta.

Cuando lloras a escondidas y el alma te delata porque se siente perdida.

Cuando te despistas volviéndote tierno y niño algunos segundos. Tu mirada me pide que no delate el breve descuido. La mía te responde: descuida!

Cuando dices B después de que yo diga A, por fastidiarme nada más.

Cuando sentir de verdad desconcierta tu absoluto "yo" pero ante todo que nadie se entere. Sobre todo, yo .

Cuando me declaras la guerra sólo por el afán de ganarla.

Cuando me maldices en silencio porque te presento como un amigo.

Cuando dibujas corazones en la arena y los difuminas antes de que llegue.


Por todo esto y algo más, de vez en cuando me gusta guiñarle a la vida. Tal vez trate de alegrarte y sin duda, engañarte cuando digo : quizás no te conozco.

miércoles, 22 de abril de 2009

PARALELAS Y NO PERPENDICULARES

Hoy sería lógico que hablara de libros, del caballero que salvó a la princesa de las garras del dragón y lo abarrotado de gente, tenderetes, prensa y curiosos que está el Paseo de Gracia.

Sin embargo nunca me ha gustado hacer “lo que toca” o lo que los demás esperan que haga. Hoy no hablaremos de Sant Jordi, no me apetece.

Prefiero explicar lo que me ha pasado esta mañana. Pocas veces suelo pararme a mirar las fotos que cuelgan de las paredes de mi habitación. Hay una que la tengo llena de cuadros con collages de fotos de diferentes etapas de mi vida. Siempre están ahí y, la costumbre de verlos me impide mirarlos. Hoy me he parado por lo menos unos minutos o, eso me ha parecido a mi. Había mucha gente, diferentes instantes, familia, paisajes lejanos, recuerdos, amistades que ya no son, momentos que nunca más se repetirán. Mi mirada volaba al pasado y por dentro los sentimientos se mezclaban como si alguien los estuviera removiendo con una batidora. Me alegraba revivir todos los momentos felices que me hacen ser lo que soy. Aunque también me dolía ver que algunas personas nada más se cruzaron en mi camino, eran amistades colgadas; real y metafóricamente hablando.
De repente mi vista se ha detenido en una imagen: dos personas abrazadas que irradiaban felicidad: Gina y yo.

Nos conocimos en el colegio cuando llevábamos bata, uniforme y nos vestíamos de adolescencia. Han pasado unos cuantos años desde entonces pero nuestra amistad sigue intacta.

Divertida, generosa, sensible, comprensiva, con ganas de comerse el mundo…cualidades que la distinguen, que la hacen especial. Irradia buena onda, bromista y sin pelos en la lengua. Es de esas personas que no tiene enemigos, es todo corazón. La sobredosis de optimismo dan como resultado una sonrisa ingenua con la que se gana al personal - femenino y masculino- . A la segunda cerveza se hace con tu confianza, habla con gracia a los desconocidos, cada día hace nuevos amigos. Es singular, es ella misma.

Hoy no es un día cualquiera y no lo digo porque me haya parado a recordar la suerte que tengo de conocerla o de que su amistad camine en paralelo y no perpendicular. Lo especial de esta mañana es que hace 23 años que Gina sonrió al mundo. Felicidades amiga!

lunes, 20 de abril de 2009

RED SONGS


Tiene nombre de pintalabios, es madrileña pero le gusta cantar en inglés, se siente más cómoda – dice.

A sus 22 años ya se ha hecho un hueco en el mundo de la música folk pop aunque ella afirma que el folk de verdad está en Estados Unidos.

Con gafas de colores, mirada tímida y sonrisa rojo pasión nos alegra con canciones como Cigarrettes o They don’t believe. Ella es Russian Red.

Pablo Motos (El hormiguero) y Buenafuente no se mojan demasiado con su: “dará qué hablar”. Pero sin duda, Lourdes Hernández – que así se llama en realidad – cautiva con sus letras suaves, muy acorde con una imagen tan natural como algunos de sus videoclips.

Para los que también vean algo más en esta joven, informarles que el próximo 16 de mayo la madrileña estará en la Faktoria d’Arts (Terrassa).

domingo, 19 de abril de 2009

TRIUNFAR

Artistas, genios, locos apasionados se juntaron en el París del s.XX. Poesía, pintura, escultura…el arte corría como el vino en los cafés más bohemios de la ciudad.

Algunos crearon y se crearon a sí mismos. Otros sólo supieron destruirse. Hubo dos artistas por ese entonces, ambos pintores aunque nunca amigos: Picasso y Modigliani.

La rivalidad entre ambos, “Modi”- que así llamaron a Amedeo Modigliani sus amigos -la calmaba con irreverencia, alcohol y la ahogaba al final, con su propio orgullo.

Los dos vivieron sobre el mismo escenario, se dedicaron al mismo arte pero algo marcó la diferencia entre ambos: el éxito.

Mientras Picasso vivía cómodamente rodeado de sus cuadros, de los aplausos del público, la ostentación y el reconocimiento; Modigliani malvivía sin apenas beneficio, ajeno a los lujos y más cerca de la bohemia pintoresca de París que de los placeres caros.

La muerte tocó a su puerta mucho antes que la gloria. Fue post mortem cuando su obra alcanzó el éxito.

Y es que triunfar tiene forma. El triunfo sería como dibujar un círculo que a veces se hace vicioso. Los que lo poseen lo siguen engrosando mientras que aquellos que lo desean, demasiado es que lo están soñando. Todo artista tira al aire una moneda, con su cara y con su cruz. La suerte y el azar entran en el juego de sus vidas. Picasso tuvo cara en todo, Modigliani vivió la cruz.

Muchos tienen talento, no todos el reconocimiento. Pero ¿qué mide el éxito? ¿Qué significa el reconocimiento?

Supongo que hace falta estar en la piel del artista. Sentir lo que tantos como Modigliani, Rivera o Van Gogh pudieron experimentar en vida. Artistas que vivieron por y para su arte, que creyeron en ellos mismos porque persistieron. Muchos vivieron en un mundo de alucinación continua, de autodestrucción, desesperanza y permanente borrachera.

Lucharon a su manera, entre glorias y miserias. Algunos perdieron el sentido pero nunca la razón que les movía a vivir. Nunca abandonaron su arte y posiblemente sea ese el mayor triunfo que pueda alcanzar el ser humano. Triunfar, a veces no es lo que alaba la mayoría.

miércoles, 15 de abril de 2009

DE ESPÍAS


He llegado 5 minutos tarde, nunca me ha gustado esperar. La sala estaba llena hasta los topes. No había ninguna silla libre pero a la gente no le ha importado apelotonarse en pasillos, esquinas y huecos libres de la sala para ver la presentación del nuevo libro de la periodista y escritora Cristina Morató: “Cautiva en Arabia”.

Ha sido en Casa Asia (Diagonal, 490) donde Gemma Nierga - entrevistadora - y Cristina Morató – entrevistada - han dado a conocer primero con unas imágenes y la posterior entrevista sobre la muy interesante biografía de la espía y aventurera, Marga D’andurain.

El lugar tenía cabida para unas 200 personas pero sin lugar a dudas había más gente. Morató lo ha agradecido al inicio del encuentro en el que no han faltado bromas, anécdotas y gratitud al público y las personas que han hecho posible este proyecto. Incluido Jacques D’Andurin, hijo de la protagonista del libro Marga D’Andurain.

Sinceramente no esperaba que me cautivara de tal forma la novela. Me hacía gracia ver a las periodistas en directo y por eso, me he pasado. Cuando todos aplaudían al finalizar de la presentación no lo he podido evitar: se me ha puesto piel y pelo de punta y, créanme que hacía el calor suficiente para aplastar lo que fuera. Ha sido, sin duda, un acto involuntario y el presentimiento de que valdrá la pena hacerse con ella.

La protagonista fue una mujer avanzada para la época que le tocó vivir. No se sometió al mundo predominantemente masculino que la rodeaba. Fue emprendedora, rebelde pero sobre todo convirtió su vida en una aventura continua, sin cabida al aburrimiento y con pinceladas de tragedia a lo largo de toda su historia. Viajó a Siria donde regentó un hotel, se convirtió al Islam, vendió opio a los nazis, envenenó a su marido y como de dosis no entendía, él aguantó lo suficiente (por lo menos 15 días desde que lo envenenó) para destapar el crimen que intentaba cometer su mujer. Los escándalos que la salpicaron la llevaron a pasar un tiempo en la cárcel de Yidda.

Estos son algunos detalles de la vida de una mujer que nació para crear el caos. Su condición sexual no parecía ser un impedimento ni freno en su trayectoria marcada muchas veces por la inconsciencia. Aunque en repetidas ocasiones se alejó de lo legal y ético, su valentía merece ser rescatada tal y como ha hecho Cristina Morató.

Apuesto que será todo un éxito y sino un ejemplo a seguir para todas las mujeres que se atreven con todo. Yo, por ahora, me he prometido que no compraré ningún libro más hasta que no acabe los que estoy leyendo. Sin duda, el siguiente será “Cautiva en Arabia”.


martes, 14 de abril de 2009

VIDAS EXTASIADAS


Extravagantes, desinhibidos, vividores empedernidos. Despiertan cuando ya han perdido el sentido, filósofos del placer dan rienda suelta al hacer.

Son los fun&roll o así me gusta definirlos. Cantantes, músicos, artistas, pintores y escritores. Son muchos a la vez y ninguno al mismo tiempo. La vida es su escuela, nunca dejan de aprender. Experiencias a su medida, sin ley ni orden. Infieles a su persona se fugan con su personaje. Todos esperan ser algo diferente. Se desprenden de los apellidos y sacan a lucir su esencia rota y destruida. Se recomponen con los éxitos y los inicios colmados de éxtasis que acaban con speed. Su gasolina que reposa entre copa y hielos los mantiene en la fiesta eterna que es su vida. Desayunan tentación, se visten de desenfreno y anochecen con sunglasses.
Unos, yuppies otros sin monedas, toman en serio todo lo que es nada. En continuo espectáculo sobreviven del revés. Personalidades arrolladoras que ocultan un carácter frágil. Son amigos de la heroína que no sale en los comics.

No hay días ni noches, diluyen sus vidas con el perfume del exceso. Se llenan de todo y de eso. Cambian el mundo a cambio de sus vidas. No son buenos comerciantes, negocian con sus vidas pero son artistas, nacen con estrella.

Muere la persona y después el personaje. A la inversa significa una tragedia. Las sustancias que corretean por sus venas les devuelve la insolencia, sale el genio que llevan dentro aunque nadie los conoce. Paradojas de la vida, todos saben su nombre pero no quien son en realidad.

Si no fueran diferentes no serían recordados. Su mayor talento, ser divergentes. Originales hasta con su adiós que nunca llega por motivos naturales.

Vidas que rodaron extasiadas, cortas pero aceleradas. Al final, quedaron extraviadas.

lunes, 13 de abril de 2009

ATREVERSE

Abrazada a la almohada un día te despiertas con ganas de atreverte. Piensas - hoy quiero ser valiente.

Qué fácil soñarlo, toda una aventura materializarlo.

Tantas cosas allá fuera te llaman para que salgas pitando. Pero hoy sales a buscarlo todo: lo que amas y lo que temes. Cruzas tu línea divisoria, esa que te amarra al deber. Atraviesas la calzada del vivir mirando fijamente al verde semáforo del placer. No hay stop que interrumpa la “S” de tus pasos, pues emborrachada estás de ilusiones. Has barrido las fronteras que limitaban tu existencia. Lanzas a la canasta del reciclaje una bola hinchada de ego. Te subes al ring de los infiernos y boxeas con tus miedos. Te arriesgas a perder y pierdes. Luego vuelves a tropezar con las piedras del ayer. Ensangrentadas las rodillas, arañado el yo al fin sientes el despertar. Ahora puedes preguntar ¿quién soy yo? Con la maleta preparada, vuelas rumbo a cualquier parte. Le das fiesta a la culpa. Sabes que sólo te quedarás esperando cuando esperes algo, por eso ya no esperas. Aprendes que lo bueno a veces hace mal y te abandonas a lo malo que hace bien. Sintonizan todos tus sentimientos porque ya no ocultas tus deseos. Te conviertes en espía de tus vicios, los persigues pero ya no los escondes. Te fumas los días de tu vida, con sabor a mentolado y humo en la nariz.

Decides no elegir ni vivir de los recuerdos. A la portería del presente chutas los lamentos del pasado. Haces más deportes. Sales a correr con tu compañera soledad. Sin prisa pero sin pausa, dando tiempo a entenderla. Pero ya no te asusta. Guardas la razón en los bolsillos y sacas las emociones. Usas sólo la razón para decir que no hay razón para sufrir. Aún así padeces porque te has lanzado al dolor. Lloras hasta exprimirte y sin reprimirte.

Caminas por la vida con lo puesto, desmaquillada tu sonrisa; imperfecta pero cierta. Hoy te atreves a ser feliz. Miras a la cara al dolor hasta que desvía su mirada, has ganado la jugada. Y qué más da. Y es que las verdades mentirosas no se aguantan, son tan flacas como su veracidad y al final se adelgazan hasta desaparecer. Vives sin justificarte. Sientes sin saber porqué, sin saber el fin, intuyendo un principio.

Sólo sabes que un día lo lograste y te vino a la mente esa mañana que te levantaste con ganas de atreverte.

martes, 7 de abril de 2009

EL HERIDO

He conocido a un herido
pensé al principio – es un retraído.

Personaje carismático
cínico y asmático.

Se ahoga con su pena
hasta que se insufla
su dosis de condena.

El humor es su armadura
se hace pasar por caradura
agradable su literatura
menuda impostura!

Disfrazado de malicia
despista tanta treta
sólo es una careta
tristeza disimulada con delicia.

Se siente todopoderoso
simulando su dureza
mientras bebe una cerveza
ya no se pone nervioso.

Las manos del herido
me dan la pista
le pregunto si es artista
y en efecto, es pianista.

Se abren todas mis heridas
de esos años de piano
que hoy recuerdo con tristeza
maldigo mi pereza!

Pero hablemos del herido
ese artista afligido.

El piano es su escape
sus manos la medicina
el topionic de su herida
lo devuelven a la vida.

Compone el sentimiento
el suyo, agrietado
lo mantiene ofuscado
solfeando al viento.

Agujeros en el alma
rellenados con canción
su mirada, un disparo en calma
escayolado tiene el corazón.

Se alimenta de melancolía
nunca prueba la alegría
pasea la fragilidad
en el teclado es pura agilidad.

Interesante momento
el día del encuentro
caminaba el recorrido
y tropecé con un herido.